El garbanzo es un invitado recurrente en la cocina mediterránea. De sobras conocido como una de las legumbres por excelencia, este posee unas cualidades nutricionales que lo colocan en lo más alto. ¡Vamos a descubrir el origen de esta legumbre, sus propiedades y otras curiosidades!
Origen
El nombre de esta legumbre en latín es Cicer arietinum L., y pertenece a la familia de las Fabáceas. Es originario de Turquía, desde donde se extendió hacia Europa. De hecho, se han encontrado restos neolíticos en Suiza que confirman su consumo en esa época.
En nuestro país, fueron los cartaginenses los que estimularon su cultivo y consumo, y actualmente se cultivan en toda la península Ibérica.
En la plantación de esta leguminosa es recomendable no repetir su cultivo sobre el mismo terreno por lo menos hasta que no han pasado dos ó tres años.
Tipos
Existen tres variedades principalmente. Según su localización geográfica, podemos determinar si son de la zona mediterránea y eurasiática.
Las principales variedades españolas son el Castellano, de tamaño medio, esférico y con un color amarillo característico; el Blanco Lechoso, que es más grueso y alargado, con surcos muy marcados y de color blanco amarillento y el Pedrosillano de tamaño pequeño y forma casi redonda, con la superficie lisa y pico pequeño y agudo. También regionalmente se encuentran otros como el Venoso Andaluz, el Chamad, que se cultiva en Granada, etc.
Propiedades
Son ricos en hidratos de carbono de absorción lenta, o complejos. Estos hidratos de carbono junto con la alta concentración de fibra que aporta esta legumbre, se absorben de manera muy lenta por el organismo. Esto los convierte en un alimento de bajo índice glucémico, es decir, no hacen aumentar significativamente la curva de azúcar en sangre.
Si hay que destacar algo, como legumbres que son, es su cantidad de proteínas vegetales que aportan. Y es que las proteínas las podemos conseguir tanto de alimentos de origen animal como de alimentos de origen vegetal. De las proteínas de origen vegetal se ha dicho que no son tan completas como las de origen animal, pero lo cierto es que se ha visto que no es así. Hay algunos alimentos que contienen todas las piezas necesarias para ser proteínas de alta calidad y digestibilidad, como es el caso de los garbanzos o la soja, entre otros.
Su uso en la cocina
La verdad es que como ingrediente se utiliza en infinidad de platos. Podemos usarlos para hacer cocidos tradicionales, hummus, ensaladas, como acompañamiento de verduras… Su presencia en la cocina actual es muy variada, es un alimento muy agradecido.
Pero para que estén perfectos, deben ponerse a remojo con abundante agua toda la noche antes de cocerlos. Después, podremos cocerlos en otra agua distinta a la del remojo, durante dos horas aproximadamente. Pero todos estos pasos puedes evitarlos y simplemente hacer girar una tapa de rosca y obtener tus deliciosos garbanzos cocidos en su punto, suaves y sabrosos, abriendo un bote de Ja’e.
Nosotros nos encargamos de dedicarle el tiempo necesario a esta deliciosa y preciada legumbre para que tu inviertas tu tiempo en disfrutar de él en tus platos preferidos.
